Quito: El ombligo del mundo

Queremos conocer Quito. Queremos estar en la Mitad del Mundo. Queremos tener un pie en el hemisferio Norte y otro en el hemisferio Sur. 
Y empujando a Huella -nuestra kombi-, que parece que se resiste a sumar un kilómetro más a estos 14 mil que lleva recorridos, llegamos a está ciudad ubicada a 2.800 metros sobre el nivel del mar.

La altura nos previene que vayamos despacio, pero hay tanto por conocer, que nuestra ansiedad no entiende de precauciones.

La llaman "la ciudad de la eterna primavera", ya que su temperatura oscila entre los 14 y 24 grados de junio a septiembre y entre los 8 y 15 grados de octubre hasta abril.Su centro histórico es el más grande de América, 320 hectáreas de edificaciones coloniales, perfectamente conservadas y que en 1978 le valió el título de Patrimonio Cultural de la Humanidad.

Centro Histórico.

Plaza de San Francisco.

Caminando por las calles no sólo encontramos museos, iglesias, teatros y centros culturales, sino casonas donde habitan personajes que mantienen la esencia y tradición de esta mutifacética metrópolis. Los parques son enormes y resultan siempre una invitación a hacer algún deporte o a sentarse debajo de sus árboles a tomar unos ricos mates.

Disfrutar el reflejo del atardecer sobre el volcán Cayambe.

Parques iluminados.

Basílica del Voto Nacional.

Y cuando Quito empieza a oscurecer, desde alguno de sus 6 miradores, la ciudad se vuelve lucecitas de colores. 

Quito de noche

Vista desde el Parque Itchimbía.

Y va siendo hora de acercarse a La Mariscal, el barrio de los bares y los restaurantes. 

Hace días venimos añorando una promoción para disfrutar de  una parrillada y una oferta para amantes del vino, pero nos conformamos con unos riquísimos bolones de plátanos rellenos de queso.

Plátano maduro con queso o chicharrón.

Los pies nos laten, la memoria de la cámara de fotos no tiene más espacio y aún así siempre nos falta algo o alguien más por conocer en este Quito que tiene la misma cantidad de horas de sol que de sombra y que sin dudas es un lugar único en el ombligo del mundo.