En éstos días me llené de música de Gustavo Cerati.
No me canso de escucharlo.
Vuelvo a descifrar canciones que me hablan. Juegos de palabras que traducen lo que alguna vez quise decir y no supe cómo.
Así fue siempre su música para mi.
Decías que poder decir adiós es crecer pero puta ¡qué tristeza!
Desde hace 4 años éramos conscientes de que éste día podía llegar, aunque quizás, nos habíamos -o nos habías- esperanzado a creer en la posibilidad de que al final hay recompensa.
Igual... ¿cuál habría sido la recompensa para vos, independientemente de los que queríamos imaginarte otra vez despierto y arriba de un escenario?
La muerte, a veces, puede ser una salvación, pero solemos negarla.
"Todo este tiempo dormido fue necesario, quizá, para enseñarte a morir consolando a tus seres queridos. Los verdaderos artistas, estoy convencido, conocen la muerte antes de morir. No se dejan llevar ni un minuto antes ni uno después de reconciliarse con la vida" escribió el Indio Solari hablando de Cerati. Yo también estoy convencida que hay personas que pueden prepararnos para que su despedida no duela tanto.
Así y todo, duele.
Y siento tristeza cuando pienso que nunca más voy a volver a escucharlo en vivo ni a esperar con ilusión su nuevo disco. Pero también me pregunto ¿cuánto hay de egoísmo en todo ésto? No te conozco, sólo te conozco por tu música y te quiero a vos, por tu música también.
Me enteré por facebook de tu muerte cuando la noticia aún no figuraba en los portales de noticias. A los minutos todo se convirtió en Gustavo Cerati y su música y, además de lágrimas, sentí que el archivo de mi memoria se había activado en orden aleatorio y me llevaba a momentos que creí casi olvidados.
Entonces, me encontré escribiéndole a una amiga, que quiero y con la que no me hablo hace mucho, y recordando juntas los recitales tuyos que habíamos compartido.
Me vi saliendo a las apuradas del trabajo para llegar al Teatro Colón y experimentar una caricia al alma en Once Episodios Sinfónicos.
Me transporté al momento en que entendí que separarse de la especie por algo superior no es soberbia es amor y así pude cerrar un noviazgo.
Mi amiga Paola me rescató de la caja de recuerdos aquella vez de adolescentes en que corrí a pedirte que nos firmaras un disco, un compilado de canciones de él y otros, que ahora, seguramente, está en alguna caja de recuerdos que queremos encontrar -o tal vez ya no importe, porque éste regalo del pasado nos acercó una vez más y sonreímos por la complicidad de tantos momentos en nuestro haber, y eso ya es suficiente-.
Momentos, instantes, personas, sentimientos, recuerdos, pensamientos se me hacen presentes en estos días nostálgicos en México. La memoria trabaja incesantemente mientras tu música sigue sonando.
Y entonces, pienso que a muchos de los que crecimos con tu voz pudo haberles pasado lo mismo. En éstos días creaste puentes. Adorables puentes que generaron conexiones de amor y recuerdos íntimos. Creaste un puente más allá del infinito.
Es casi una obligación decirte gracias totales.
Todos y cada uno de los post me transportan a lugares increíbles y me emocionan hasta la piel de gallina. Porque a ustedes, Maru y Martin, los quiero tanto y les deseo interiormente que cada cumplan sus sueños. Este post en particular a mi también me acercó una vez más a mi amiga para rememorar nuestras andanzas, complicidades e instantes de plena felicidad en nuestras eternas charlas.
ResponderEliminarDesde que hace cuatro años nos enteramos del ACV de Gustavo Cerati algo en nuestros corazones se empezaba a oprimir. Porque era un talentoso compositor, un constructor de sonidos impecables y porque no quería que aquel genio, que me acompaña desde los 12 años, se fuera.
Hoy se fue físicamente un músico virtuoso que, como todos los artistas, nos marca en recuerdos y épocas de vida.
A subir el volumen que es el mejor homenaje !!
ResponderEliminarThanks for sharing Articles
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