Erick Bonilla es un viajero que está bajando desde Costa Rica hasta Ushuaia, Argentina.
Lo hace en su pick up llamada "Dora" y justamente, al igual que nosotros, está en Medellín.
Esta tarde recibimos un mensaje de él que decía: "Me gustaría apoyarlos en la campaña navideña. ¿Qué necesitan?". Le comentamos que cualquier cosa venía bien: juguetes, ropa para chicos y grandes, libros...
Que nuestra idea es repartirlos en Nochebuena en algún lugar de Colombia al que quizás el Papá Noel de los renos no llegue y donde sí queremos llegar con la Kombi Rutera para compartir la noche del 24 de diciembre.
Horas después Erick nos avisó que estaba esperándonos al lado de la mismísima Huella.
Hasta ese momento sólo nos conocíamos -como nos pasa con mucha gente- mediante una computadora; así que fue una alegría poder abrazarnos y vernos las caras en vivo y en directo.
Pero la felicidad fue aún más grande cuando éste chico que lleva recorridos más de 4.000 km y que un día decidió hacer realidad "un sueño sin cronograma y con toda una vida para cumplirlo", empezó a sacar del auto paquetes de regalos con juguetes que él mismo fué a comprar durante la tarde.
¡No lo podíamos creer! O mejor dicho,
sí lo podemos creer porque el camino nos cruza permanentemente con gente como Erick que da sin esperar nada a cambio.
Y en definitiva eso es el amor puro y verdadero. En el que creemos, el que nos enseña, el que paso a paso queremos imitar.
¿Se imaginan la felicidad de esos niños cuando reciban su regalo navideño?
Y ojo que no hace falta dinero para hacer feliz a otro. Sólo es necesario tener la intención y la voluntad de hacerlo.
Cuando salimos de Argentina mucha gente contribuyó a que carguemos 50 cajas de donaciones en el techo de Huella y pudiéramos repartirlas en lugares humildes de las provincias del norte argentino, en Bolivia y también en Perú. Volvimos a juntar en Quito para entregar en Ecuador y ahora estamos recolectando en Colombia donde, además de Erick, los amigos de
Paso Bueno ya colaboraron entregándonos ropa que ya no usan más y les será muy útiles a quienes no tienen.
¡Por muchos Erick en el mundo que reflejan que el amor todo lo puede!
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¡Gracias Erick! |